Por: Nancy Gramigna
Una mañana de expectativa en la feria científica del Colegio Guadalupe se transformó en caos cuando un experimento que combinaba alcohol etílico y fuego derivó en una pequeña explosión que generó quemaduras en varios estudiantes y una madre presente.
El hecho tuvo lugar alrededor de las 10:30 h en la sede del colegio, ubicado en la calle Paraguay al 3900-3925, en Palermo. Según testimonios, los alumnos manipulaban recipientes con alcohol etílico en el patio o en un aula que daba al patio, y uno de esos recipientes sufrió un error en su manipulación, provocando la propagación del fuego.
Los servicios de emergencia del SAME acudieron al lugar. Uno de los alumnos, de 16 años, fue trasladado al Hospital Gutiérrez con quemaduras que afectaron entre el 30 % y 35 % de su superficie corporal, incluyendo rostro, cuello, tronco y abdomen. Otro estudiante, de 13 años, fue derivado al Hospital de Quemados con entre 15 % y 20 % del cuerpo afectado. Tres personas más —dos estudiantes y una madre que se encontraba en el lugar— sufrieron quemaduras leves y fueron atendidas en el lugar.
Testigos relataron escenas de pánico. Uno de los alumnos dijo:
“La mesa explotó… el chico se prendió fuego de pies a cabeza… estaba al lado mío y fue tremendo”.
Otro testimonio aseguró que no había matafuegos ni extintores en la zona del experimento.
Desde el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires informaron que ya se encuentra en elaboración un protocolo para regular las ferias de ciencias y experimentos escolares, con vistas a reducir riesgos y establecer normas de seguridad obligatorias.
El antecedente inmediato se encuentra en Pergamino, donde días atrás otro experimento similar en una feria de ciencias provocó una explosión con decenas de heridos.